La importancia de una adecuada selección de personal en las organizaciones empresariales es indiscutible. Son muchos los factores que se ven perjudicados cuando no se elige de forma correcta al candidato o candidata. Bastaría tan solo recordar el coste en tiempo y formación, el desajuste en el equipo de trabajo o el deterioro de la imagen de la empresa cuando la rotación es alta.
En el transcurso de nuestra actividad hemos desarrollado un proceso de selección que permite definir con bastante precisión el perfil del candidato o candidata y que, en gran medida, se obtiene a partir de las exigencias y expectativas explícitas de la empresa para la función concreta, pero también a partir de otras implícitas, consecuencia de la cultura organizativa y de sus valores.
Estamos convencidos de que el encaje de la persona en un equipo y en un entorno depende de múltiples factores que, además, no permanecen estáticos en el tiempo, de forma que este proceso no es, por definición, automatizable. Requiere una gran inversión de tiempo y de adaptación a las necesidades del cliente. Por ello, siempre que la empresa tiene disponibilidad, procuramos realizar el proceso vehiculando su participación de forma muy activa en el mismo, especialmente en la recta final, cuando los finalistas muestran su idoneidad para encajar en el equipo de la organización.